Esteban Pulón, diputado del Partido Socialista por Santa Fe, se refirió a la media sanción de la actualización de los haberes jubilatorios y restitución de la moratoria previsional así como a la emergencia en salud pediátrica.
En CNN Primera Mañana, afirmó que fue una jornada como “productiva, pero atravesada por tensiones que revelan las prioridades y contradicciones del oficialismo y sus aliados”.
Destacó que además, se “logró avanzar en tres proyectos clave: la declaración de emergencia climática ante los daños ocasionados por las tormentas en el norte bonaerense y santafesino, la emergencia hídrica en la misma región y, por primera vez, la emergencia en discapacidad.
Sobre la declaración de emergencia en salud, el legislador afirmó que “pediatría es una de las especialidades que más estudiantes ha perdido por los bajos salarios. Si no revertimos esto, no habrá médicos preparados para enfermedades poco frecuentes o de alta complejidad”.
También denunció que el abandono del debate por parte de algunos bloques fue “una decisión política, destinada a obstaculizar proyectos que ya contaban con acuerdos previos y que tenían impacto presupuestario bajo”.
Esteban Paulón cuestionó, además, las amenazas del presidente Javier Milei de vetar las leyes aprobadas y remarcó que “no podemos cerrar el Congreso por miedo a un veto. Nuestra función es legislar, insistir y representar. Si hay superávit, hay margen para atender las urgencias sociales”.
Según detalló, el costo fiscal de la moratoria jubilatoria, bono de recomposición y la emergencia en discapacidad representa menos del 1% del PBI.
Al respecto, el diputado del Partido Socialista afirmó que “mientras se recortan pensiones por discapacidad o se congelan jubilaciones mínimas, se mantienen exenciones impositivas a ejecutivos de grandes empresas y se promueven beneficios fiscales para sectores como la minería o el gas, que aún no generan inversiones concretas”.
Finalmente, llamó a un “debate serio sobre el modelo de distribución del ajuste. No siempre pueden pagar los mismos. Si un gerente cobra 10 millones en dividendos y no paga impuestos, hay un problema de prioridades. La motosierra no puede caer solo sobre los más vulnerables”.